Obras de la exposición

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  • Aparición de Cristo a su madre

    Aparición de Cristo a su madre

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    El entierro del cuerpo de San Lorenzo

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  • La Adoración de los Pastores

    La Adoración de los Pastores

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  • La decapitación de Santiago el Mayor

    La decapitación de Santiago el Mayor

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  • La Flagelación

    La Flagelación

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  • La Sagrada Familia

    La Sagrada Familia

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  • La Virgen María

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  • El Apóstol San Juan

    El Apóstol San Juan

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  • Nacimiento de Cristo

    Nacimiento de Cristo

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  • San Jerónimo penitente

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  • Cédula real con el nombramiento de Navarrete como pintor del Rey

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  • Contrato para los cuadros de altar de la Basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

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  • Memoria de los lienzos y cossas

    Memoria de los lienzos y cossas

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  • Aparición de Cristo a su madre
    Aparición de Cristo a su madre
    Juan Fernández de Navarrete Entre 1578-1579 Óleo sobre lienzo, 266 x 307 cm (con marco) Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Navarrete consiguió en esta representación una de sus pinturas más atrevidas, al presentar a Cristo irrumpiendo de forma desenvuelta en la estancia de su madre con ese ampuloso manto revoloteado de color rojo y con el estandarte victorioso de su Resurrección. Su pose ingrávida y su potente musculatura de origen miguelangelesco se inspiran en el modelo de Cristo resucitado de Gaspar Becerra para la iglesia de San Giacomo degli Spagnoli de Roma. Estilísticamente corresponde a una etapa avanzada de su producción, en el que impera el venecianismo. De hecho, fue una de sus últimas obras, ya que aparece como pintura "acabada" en el memorial de los "lienzos y cossas" pertenecientes al artista, que se dejaron en 1580 en El Escorial a la muerte del pintor para ser entregados a Felipe II.

  • El entierro del cuerpo de San Lorenzo
    El entierro del cuerpo de San Lorenzo
    Juan Fernández de Navarrete 1578-1579 Óleo sobre lienzo, 300 x 231 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Este cuadro aparece registrado como "bosquejado" en el memorial de los "lienzos y cossas" de 1580 dejados en El Escorial a la muerte del pintor, y según Sigüenza, lo terminaría uno de sus discípulos. Se recoge el momento en que san Hipólito y unos compañeros hurtan el cuerpo ya difunto del santo, para que éste no fuera profanado por los soldados romanos, aprovechando la oscuridad y el silencio de la noche. El tema le permite utilizar los efectos lumínicos de claroscuro que ha aprendido de los venecianos para acrecentar el dramatismo de la escena nocturna. El cuerpo tostado del santo aparece únicamente iluminado por la luna, efecto tomado del Martirio de san Lorenzo de Tiziano, situado en la iglesia vieja del Museo y por la candela que está encendiendo el joven de la derecha, idea que está extraída de los Bassano y que también utilizaría el Greco en su Soplón.

  • La Adoración de los Pastores
    La Adoración de los Pastores
    Juan Fernández de Navarrete 1575 Óleo sobre lienzo, 367 x 230 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    El pintor escenifica el tema de la Natividad en un claroscuro violento de clara influencia veneciana y muy acorde con la estricta veracidad de los textos sagrados. La idea de dispersar la luz en ráfagas, o la de utilizar al Niño corno foco de iluminación directa a la Virgen le viene de Tiziano y de los Bassano, así corno también el efecto de la vela encendida que lleva san José en la mano. La utilización de una técnica suelta y fluida le permite crear esos "admirables" efectos de luz, muy especialmente sobre el cuerpo del Niño, cuello y brazos de la Virgen, y las manos de san José. Pero, a la vez, consigue una representación de una gran ternura. Corno dice Sigüenza, "vese en ella una hermosura celestial con el afecto de Madre, y el infante recién nacido que alza los bracitos para abrazarse con ella, enternece el alma de quien lo mira".

  • La decapitación de Santiago el Mayor
    La decapitación de Santiago el Mayor
    Juan Fernández de Navarrete 1571 Óleo sobre lienzo, 364 x 228 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Navarrete escenifica el drama del martirio del apóstol con verdadero realismo, representando justo el momento en el que el verdugo atraviesa el cuello del santo con una enorme daga, ya que lo que se pretendía era mostrar el tema con claridad y corrección, de acuerdo a los dictámenes de la Contrarreforma, y conmover al fiel cristiano. Es su primera gran obra de plena madurez, en la que el pintor manifiesta un verdadero conocimiento de la pintura veneciana, con la utilización de una técnica más suelta y una gama cromática más rica, lo que le permite conseguir una mayor fuerza expresiva. También ha sido la pintura más alabada y conocida de toda la producción de Navarrete, sirviendo de fuente de inspiración a otros artistas españoles, como Alonso de Herrera, Francisco Ribalta y Vicente Carducho.

  • La Flagelación
    La Flagelación
    Juan Fernández de Navarrete 1575 Óleo sobre lienzo, 371 x 232 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    La composición puede estar inspirada en el famoso fresco de la Flagelación de Sebastiano del Piombo en San Pietro in Montorio de Roma, ya que la figura de Cristo presenta la misma concepción de fuerte musculatura, idéntica disposición de atadura a la columna clásica en el centro, y la misma actitud de humildad y resignación. Pero el de Navarrete irradia una mayor serenidad e invita expresamente a la piedad devocional tan requerida en el arte de la Contrarreforma. A ello ayuda el joven de la izquierda, que contempla con verdadera expresión de angustia el sufrimiento de Cristo. La armoniosa arquitectura clasicista del fondo puede tener su origen en las arquerías con pilastras de estilo jónico del piso superior del Patio de los Evangelistas de El Escorial, arquitectura basada en los modelos de Andrea Palladio.

  • La Sagrada Familia
    La Sagrada Familia
    Juan Fernández de Navarrete 1575 Óleo sobre lienzo, 370 x 232 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    La imponente Sagrada Familia es una de las obras de Navarrete más influenciadas por el estilo manierista toscano-romano, al disponer la escena de forma piramidal. Los ampulosos ropajes de los personajes y el desbordante cortinaje verde del dosel otorgan a la escena de una solemnidad majestuosa. Las novedades pictóricas de Navarrete se observan en la brillantez del colorido y en la soltura técnica, aplicada a base de pinceladas más opacas para la consecución de los pliegues de las vestiduras. Los detalles anecdóticos de los animales de primer plano no acabaron de agradar a los comitentes, ya que cuando el artista se compromete a realizar las parejas de santos para los altares de la Basílica, se especifica en el contrato que no ha de incluir "ni perro, ni gato, ni otra figura deshonesta", según la normativa de la Cuarta Sesión del Concilio de Trento.

  • La Virgen María
    La Virgen María
    Juan Fernández de Navarrete Entre 1578 y 1579 Óleo sobre lienzo, 192 x 87 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Ambas obras son dos buenos ejemplos de la capacidad de Navarrete como copista y reproducen de forma muy exacta las imágenes de la Virgen y San Juan del Calvario de Rogier van der Weyden, que se encontraba en la capilla del Palacio Real de Valsaín -Segovia-, desde su llegada a España hacia 1559. El pintor realizó otra versión a tamaño natural entre 1566 y 1567 para sustituir al citado original, pero no debe ser confundida con la versión existente en el Museo de Santa Cruz de Toledo, de otra mano y de distinta procedencia. Estas réplicas individualizadas, que claramente lo fueron así desde un inicio, ya que no se observan recortes en sus bordes, están ligadas a la historia del Monasterio, flanqueando el Crucifijo de mármol blanco de Benvenuto Cellini, que se situaba desde época de fundación en el Trascoro de la Basílica escurialense hasta mediados del siglo XX.

  • El Apóstol San Juan
    El Apóstol San Juan
    Juan Fernández de Navarrete Entre 1578 y 1579 Óleo sobre lienzo, 192 x 87 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Ambas obras son dos buenos ejemplos de la capacidad de Navarrete como copista y reproducen de forma muy exacta las imágenes de la Virgen y San Juan del Calvario de Rogier van der Weyden, que se encontraba en la capilla del Palacio Real de Valsaín -Segovia-, desde su llegada a España hacia 1559. El pintor realizó otra versión a tamaño natural entre 1566 y 1567 para sustituir al citado original, pero no debe ser confundida con la versión existente en el Museo de Santa Cruz de Toledo, de otra mano y de distinta procedencia. Estas réplicas individualizadas, que claramente lo fueron así desde un inicio, ya que no se observan recortes en sus bordes, están ligadas a la historia del Monasterio, flanqueando el Crucifijo de mármol blanco de Benvenuto Cellini, que se situaba desde época de fundación en el Trascoro de la Basílica escurialense hasta mediados del siglo XX.

  • Nacimiento de Cristo
    Nacimiento de Cristo
    Anónimo español 1578-1579 Óleo sobre tabla, 39 x 32 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Este pequeño cuadro devocional sobre tabla de nogal, hasta ahora inédito, puede ser identificado con una de las dos tablillas con los "nazimientos de nro. Señor", que aparecen en el "Memorial de los lienzos y cossas" de 1580. En esta ocasión, como ocurre con el Bautismo de Cristo hoy en el Museo del Prado, sigue el estilo tardorromano a la hora de manejar los recursos técnicos, que se acrecienta por el de utilizar un soporte sobre tabla. La presencia del Niño tendido sobre unas pajas con los brazos extendidos hacia su madre, la inclusión de ese foco de luz tan intenso sobre el Niño o el acertado escorzo de san José con la vela encendida, son rasgos relevantes que permiten adscribir la obra al artista, pudiéndose relacionar de forma muy estrecha con la Adoración de los pastores de gran formato, situada junto a esta obra.

  • San Jerónimo penitente
    San Jerónimo penitente
    Juan Fernández de Navarrete 1569 Óleo sobre lienzo, 367 x 261 cm Patrimonio Nacional. Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Navarrete inicia con esta obra su primer encargo importante para El Escorial -la serie para la sacristía provisional del convento-. La composición, basada en el famoso grabado de Durero, representa al santo arrodillado ante un crucifijo sobre un suelo rocoso, pero enmarcado en un paisaje que Sigüenza califica "de mucha frescura y arboleda". La ampulosidad y precisión de sus ropajes nos recuerdan los del Calvario de Rogier van der Weyden, y el tratamiento del león y de la naturaleza es también de origen flamenco. Sin embargo, la percepción anatómica del torso desnudo y la concentración espiritual del santo en su acto de penitencia tienen su procedencia de la fría maniera romana.

  • Cédula real con el nombramiento de Navarrete como pintor del Rey
    Cédula real con el nombramiento de Navarrete como pintor del Rey
    6 de marzo de 1568 31´5 x 22´5 cm Patrimonio Nacional. Archivo General de Palacio

    A su regreso a España en torno a 1565, Navarrete se establece en El Escorial, cuando éste todavía estaba en los inicios de su construcción, pero no será hasta el 6 de marzo de 1568 cuando reciba el nombramiento de pintor del rey en sustitución del recién fallecido Gaspar Becerra. En el documento se especifica su salario anual de doscientos ducados y el cobro por separado de las obras entregadas conforme a su tasación. A partir de este nombramiento, es cuando empieza a recibir los grandes encargos pictóricos para el Monasterio de El Escorial, que culminarán con la comisión de los treinta y dos cuadros de altar en 1576 y de las pinturas del retablo mayor de la Basílica el mismo año de su muerte, acaecida el 28 de marzo de 1579.

  • Contrato para los cuadros de altar de la Basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial
    Contrato para los cuadros de altar de la Basílica del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial
    21 de agosto de 1576 31´5 x 22´5 cm. Patrimonio Nacional. Archivo General de Palacio

    El éxito de sus primeras obras le valió en 1576 el importante encargo de las 32 parejas de santos para los altares de la Basílica de San Lorenzo de El Escorial, que no pudo terminar por su pronta muerte en 1579.

  • Memoria de los lienzos y cossas
    Memoria de los lienzos y cossas
    31 de julio de 1580 31 x 22´7 cm Patrimonio Nacional. Biblioteca del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial

    Navarrete muere el 28 de marzo de 1579 en Toledo en casa de su amigo Nicolás de Vergara el Mozo, donde el artista había acudido ante el empeoramiento de su enfermedad. En julio de 1580 su hermano Diego Fernández llevó a El Escorial las pinturas que habían quedado en el taller de Navarrete tras su fallecimiento, para que fueran entregadas a Felipe II a través de su veedor García de Brizuela. Dichas obras quedan registradas en el memorial de los "lienzos y cossas” de 1580, figurando como pinturas “acabadas” la Aparición de Cristo a su madre, y como “esbozadas” el Entierro del cuerpo de san Lorenzo, y una de las dos “tablillas” con “Nazimientos de Nro. Sr.”, aquí presentes en la exposición.