El presente artículo analiza el enorme legado epigráfico custodiado en el Real Convento de Santa Clara de Tordesillas, poco estudiado anteriormente, y que constituye un valioso tesoro. Sus muros albergan más de un centenar de inscripciones medievales y modernas, en muchos casos desconocidas.
Este artículo estudia el interés que la arquitectura española despertó en el siglo XIX entre los fotógrafos extranjeros que viajaron a nuestro país para documentar sus principales monumentos. La visión romántica de España en la literatura de la época tiene así un paralelo en los inicios de la fotografía.
Esta colección de dibujos, conservada en la Real Academia de la Historia, constituye un valioso testimonio del primer viaje bajo patrocinio real emprendido por un Académico con un dibujante a su servicio para medir, describir y valorar los monumentos de la antigüedad romana en España.
Pintura de los Reinos. Identidades compartidas en el mundo hispánico