La túnica de José

Diego Rodríguez de Silva y Velázquez

La túnica de José fue pintada por Velázquez durante su viaje a Italia hacia el año 1630 y ha sido restaurada en 2015 por las alteraciones en su capa pictórica que hacían difícil apreciar su calidad.

El lienzo original tiene una forración antigua, que posiblemente ha sido el origen de los daños de la obra: un exceso de calor y presión que afectó a la capa pictórica, que tenía un barniz ligeramente amarillento, aunque el principal problema que presentaba era la reintegración de las faltas.

El primer paso fue retirar el barniz y suciedad de la obra incidiendo en aquellas zonas que más lo necesitaban. Con la limpieza se ha ido apreciando mejor la técnica del artista: se observan algunas rectificaciones y la huella dejada sobre el pincel del autor. También en la zona inferior se ven restos de trazos realizados con lápiz. La técnica utilizada por Velázquez en este cuadro es ligera, con zonas en las que el artista prácticamente deja las figuras abocetadas y algunos contornos sin remarcar, a la vez que utiliza empastes más gruesos en los puntos que quiere resaltar.

La operación más delicada de esta restauración fue la reintegración minuciosa de los pequeños puntos de falta de color, liberando la obra de la cuadrícula que perturbaba su visión. Con ello se le ha devuelto ligereza a la pintura y se recupera la sensación de espacio que envuelve al cuadro.

FICHA TÉCNICA DE LA OBRA

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