Caída libre
Caída libre es una obra en vídeo. Un plano frontal con cámara fija, un recorrido en primer plano de una sucesión de objetos que caen al agua y van desapareciendo en cámara lenta. Objetos que pertenecen al mundo cotidiano: una cama, un reloj, una carta, una foto, una silla, un colgante, una mesa, un arpa, una pistola, un sombrero, un paraguas; objetos con historias que no vemos, pero intuimos, atraviesan este espacio iluminado, como una expedición y su búsqueda.
El proyecto habla metafóricamente de una introspección en un mar interior, una inmersión en el que hay dos ideas que se interrelacionan para emerger con nuevas respuestas.
La primera, las migraciones, el movimiento, la búsqueda de una esperanza, el mar como camino y el traslado hacia un mundo que se supone o imagina o se espera mejor. El peligro de este tránsito, cuando no llegas al lugar esperado, el naufragio, físico porque te pierdes físicamente, desapareces en el mar, el naufragio espiritual porque aún llegando, siempre serás un ser que emigra y con ello también pierdes bienes. La pérdida de lo material y lo inmaterial, la relación migración/ pérdida, que se traduce en los objetos que caen al mar, el mar físico y el mar del tiempo, los recuerdos, lo dejado atrás. Igualmente puede pensarse en una interpretación positiva, el mar recoge todo lo que no necesitas, lo sepulta, lo invisibiliza, pero esta idea la asocio más a lo que vamos dejando espiritualmente, más que un naufragio, una decantación.
La segunda idea es la del mar como un “recipiente conformado por esa sustancia que es el agua”, el agua es forma y contenido, es vacío y pared, es como un cuenco que se mueve, se transforma, contiene y a la vez es contenido. En este cuenco la humanidad ha vertido durante siglos, esa memoria de pensamientos, sentimientos, pero también de objetos y desechos, contaminan el contenido y destruyen el continente, las huellas del paso del hombre por el mar, pueden ser desechos o pérdidas, pero siempre sería un factor contaminante, de la propia naturaleza del mar y de la relación entre este y el hombre, en tanto muchas veces no quiere dejarse ahí la huella que se está depositando.
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Beatriz Ruibal
Beatriz Ruibal es artista visual y cineasta. Trabaja con fotografía, cine e instalación.
Toda su obra está signada por el género retrato en la más amplia de sus acepciones. Retratos de otros, o de ella misma, a través de los objetos que elegimos para perpetuarnos. La artista entiende que esas tomas en primer plano de los objetos que fotografía, magnificados y escudriñados en sus más mínimos detalles, son la mutación o extensión metafórica de los humanos que los habitamos. Visto así, el cuerpo de toda su obra es una revisitación no al pasado sino al presente simbólico de sus protagonistas, evaluados desde una perspectiva actual. Ello hace que sus imágenes lejos de rememorar reafirmen valores contemporáneos y sean a su vez soportes fundacionales para valores futuros. Las referencias a la memoria, la nostalgia o la huella como leitmotiv de su trabajo son superadas por el statement de presente.
La metodología de trabajo de Ruibal es siempre la misma: un proceso en etapas que comienza con la investigación histórica del tema, la elección del personaje que lo reencarna, la selección cuidadosa de los objetos que lo replican y la creación de una nueva naturaleza que supera en representatividad al objeto mismo, porque ahora es su imagen simbólica.
Sus trabajos se han mostrado en exposiciones en centros de arte nacionales e internacionales, como Matadero, PHotoESPAÑA Real Jardín Botánico, Casa Encendida, Canal de Isabel II, Círculo de Bellas Arte, todas ellas en Madrid; Museo de Arte Contemporáneo de A Coruña; Centros Culturales de España en Miami y México; Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba y Casa de las Américas en La Habana; Museum of Contemporary Art Ars Aevi, en Sarajevo. Y sus películas se han podido ver en numerosos festivales internacionales como Venice Experimental Cinema and Performance Art Festival y The Short Film Corner of Cannes, entre otros.
Ha recibido distintos premios por su labor artística como Ayuda para la investigación, creación y producción artísticas en el campo de las artes visuales del Ministerio de Cultura, 2020; Ayuda a la creación audiovisual de la Comunidad de Madrid, 2019 y Beca Residencia Artística Real Academia de España en Roma, 2016-2017, entre otras.
Su obra figura en colecciones de instituciones como Colección CA2M de la Comunidad de Madrid; CSIC Consejo Superior de Investigaciones Científicas (Madrid); Fundación RAC Rosón Arte Contemporáneo (Pontevedra); Colección Candela Álvarez Soldevilla en Madrid; Colección Real Academia de España en Roma.