Rotación de piezas en la Galería: la primera edición de la segunda parte del Quijote se incorpora a la Sala de los Austrias
La “Segunda parte del ingenioso caballero don Quijote de la Mancha” de Miguel de Cervantes Saavedra ha abandonado este martes a las 8.00h la cámara acorazada del Palacio Real de Madrid rumbo la Galería de las Colecciones Reales. El desplazamiento y nueva ubicación del ejemplar, que sustituye a la edición príncipe de la primera parte de la novela, responde al programa de rotaciones, una de las señas de identidad del museo más joven de Patrimonio Nacional.
El ejemplar, que ya se puede ver en la planta de los Austrias, fue impreso en Madrid por Juan de la Cuesta en 1615. Posee un gran valor documental, al ser la primera edición de una de las obras más destacadas de la literatura universal: Cervantes aceleró la redacción de la segunda parte del Quijote como respuesta a la publicación, un año antes, de una continuación apócrifa de su novela, el “Quijote de Avellaneda”.
La edición expuesta en la Galería fue un regalo que Alfonso XIII recibió de Doña Luisa de Orleans, duquesa de Madrid, en 1921. En palabras de la directora de la Real Biblioteca del Palacio Real, Nuria Torres, “lo interesante de la secuela está en la referencia que en ella se realiza a su primera parte, publicada en 1605”. Este juego narrativo queda explícito en su Capítulo II, cuando el propio Quijote le pregunta a Sancho por lo que dicen de él a partir de la publicación de “El ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha”.
Cervantes puso fin a las andanzas del hidalgo pocos meses antes de su propia muerte, cuando ya contaba con un notable éxito que multiplicó las ediciones de la novela y su difusión, con traducciones al francés y al inglés. Hasta 1617 no se publicarían juntos los dos Quijotes, la forma habitual en la que ahora circula la obra cumbre de Miguel de Cervantes, traducida a más de 140 lenguas.